PRIMAVERA EN EL CAMINO, WÜRSELEN-WILHELMSTEIN

Ayer caminamos con el Volksuniversiteit por Alemania, cerca de Aquisgrán, en la zona Würselen-Wilhelmstein. El camino seguía colinas que subían y bajaban. Había muchos manantiales, el agua fluía por el paisaje. Se podía ver la erosión en la tierra. Con ese sube y baja del camino hoy siento las agujetas.

Primavera

Es primavera, se olía, se oía. El paisaje estaba lleno de colores verdes en todos sus matices. Ese verde amarillento, fresco de las plantas que están creciendo, o ese verde azulado de las plantas que todo el año tienen hojas. Entre las ramas crecían sutiles puntos verdes, las nuevas flora. En esta zona muchos árboles dejan ver sus raíces.

Mares y selvas

La estructura geológica ha determinado como es el paisaje hoy y como el hombre ha vivido aquí.
Hace 300 millones de años que un profundo mar se retiró de estas tierras. Es este lugar nació una selva que después volvió a ser ocupada por el mar. Este proceso se repitió muchas veces lo que hizo que se creara una zona con más de 200 cortezas de carbón. El hombre lo aprovechó y convirtió en región minera. http://sites.google.com/site/overmaas Todavía hoy, las huellas de este proceso son visibles. Ayer encontró uno de los caminantes del grupo un fósil vegetal.

La planta Aro

Marion, nuestro guía, abrió la flor de un aro que encontró por el camino. Si la flor está lista para ser fecundada, su interior sube de temperatura, unos 10 grados más que sus alrededores, y empieza a oler a estiércol o a descomposición. Así atrae a mosquitos y moscas. El aro mantiene el insecto encerrado en la flor durante un día, entonces este es capaz de escapar, ahora cargado de polen para fecundar a otros aros. http://www.van-dingenen-over-planten.nl/43.%20Eetbare%20aronskelk.html

El camino

Todo fluye, todo está en relación. Ahí muchas similitudes en cuanto a forma y color. La forma escamada en que se construye el tejado de la fortaleza de Wurm; la estrías del fósil sobre la mano; las grietas de la puerta medieval que el tiempo ha hecho; las grietas de la mano; el muro donde el hombre coloca en sus agujero fetiches que les libran del mal. Sientes que tú formas parte del paisaje y el camino se abre. Como decía Machado (poeta y escritor español) “caminante, no hay camino, se hace el camino al andar”.